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Si tu gato no come ni bebe, es preocupante, y es necesario determinar por qué. Ya sea algo simple o grave, es necesario buscar una solución.
Esta ficha de Pet InfoRx® te ayudará a determinar qué debes hacer, cómo hacer que tu gato se sienta más cómodo, y cómo hacer para que vuelva a comer y beber.
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Tanto personas como perros pueden sobrevivir con una dieta vegetariana. Tu gato, no tanto. Eso se debe a que los gatos son carnívoros por necesidad, es decir, el cuerpo del gato necesita proteína animal (carne). No pueden sobrevivir, y menos aún desarrollarse, sin carne. El sistema digestivo de tu gato está diseñado para metabolizar y absorber proteínas animales de una forma mucho más eficiente que las proteínas vegetales; además, esas proteínas animales contienen los aminoácidos esenciales que necesita tu gato para que el corazón, la vista y el sistema inmunitario funcionen de forma apropiada. Así que no intentes suministrarle una dieta vegana o vegetariana a tu gato. No será para nada positivo.
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Un gato debe consumir de 3.5 a 4.5 oz de agua por cada 5 lb de peso corporal, por lo que un gato de 10 lb debería beber de 7 a 9 oz (alrededor de una taza) de agua por día. Los cuencos de agua deben limpiarse y reabastecerse al mismo nivel todos los días. Esto ayuda a controlar el volumen de agua que bebe tu gato y será más fácil notar si hay un cambio.
Las comidas enlatadas pueden contener parte del agua que consume el gato. Una lata de comida húmeda tiene alrededor de un 70 a un 80 % de agua. Por lo tanto, si tu gato come alimentos húmedos —algo muy recomendado— podría estar consumiendo de 3.85 a 4.4 oz de agua con una sola lata (con una lata promedio de 5.5 oz). Eso equivale a la mitad de agua diaria que necesita.
Los gatos no sobreviven sin agua más de tres días. La deshidratación causa una serie de efectos negativos en tu gato. Si notas que no ha bebido nada durante 24 horas, es importante que te comuniques con el veterinario.
Un gato promedio debería consumir un mínimo de 1/2 taza de comida por día. Algunos gatos podrían necesitar más, pero el veterinario podrá indicarte cuánto en función del estado de salud y del peso corporal de tu gato.
Si bien un gato puede sobrevivir sin comer durante una semana, siempre y cuando tenga agua, no es una situación favorable. La carencia de proteínas puede debilitarlo incluso más que la posible causa de la inapetencia. Esta situación es incluso más peligrosa en gatos obesos, porque están en riesgo de desarrollar lipidosis hepática.
Tu gato podría rehusarse a comer o beber tan solo porque no le gusta el cuenco o su ubicación. Además, si hay otros gatos en tu casa, uno de ellos podría estar acosándolo cada vez que intenta comer. Algunos gatos también son muy quisquillosos al momento de elegir qué comer y se rehúsan a consumir ciertos alimentos durante un período.
Otros problemas más graves pueden hacer que tu gato se rehúse a beber o comer, como problemas intestinales, diabetes, enfermedad renal y problemas con los dientes o las encías, entre otros trastornos.
Ya sea una causa simple o grave, si tu gato ha dejado de comer o beber durante más de un día, comunícate con el veterinario. Cuanto antes se diagnostique el problema, mejor se sentirán tu gato y tú.
Si tu gato bebe menos, podría deshidratarse, lo que es indicativo de una enfermedad.
Entre los signos de deshidratación, se incluyen los siguientes:
Si tu gato no come lo suficiente, podría:
Comunícate de inmediato con tu veterinario. Mientras tanto, puedes intentar algo en tu casa.
Recuerda que la comida enlatada también es fuente de agua.
Lee nuestro artículo para obtener sugerencias y más información sobre la deshidratación.
Los pasos 1 a 3 anteriores podrían tentar a tu gato a comer y a consumir más agua. De lo contrario, intenta algunas de estas sugerencias adicionales.
Lee nuestro artículo para obtener más información y sugerencias sobre cómo tentar a tu gato para que coma.
Si tu gato come 1/3 o 1/2 taza, y bebe de 7 a 9 oz de agua, está recuperándose.
Si ya llevaste a tu gato al veterinario y probaste incorporándole aditivos en la comida, pero no notas una mejoría al cabo de 36 horas, vuelve a comunicarte con el veterinario. Hará más pruebas de diagnóstico para determinar por qué tu gato come y bebe menos.
También podría hacer preguntas sobre cualquier cambio que haya ocurrido en el entorno de tu gato, incluso nuevas mascotas o personas, muebles, edificaciones, sonidos, etc.
Si no se identifica una causa médica, como infección, dolor o enfermedad, el veterinario podría recomendarte que consultes con un veterinario conductista.
Facilítale agua potable y alimento en todo momento. Para mantener la comida seca más fresca, divídela en porciones semanales al abrir la bolsa. Luego, coloca las porciones semanales en una bolsa Ziploc® en el congelador. Solo retira una bolsa a la vez. Algunos gatos prefieren alimentos superfrescos. Siempre es bueno incorporar comida enlatada para aumentar el consumo de agua. No olvides que hay muchos aditivos para tentar a tu gato a comer y beber.
Presta atención a cualquier cambio ambiental que pudiera afectar el deseo de tu gato de beber y comer. Lo que es insignificante para ti, podría ser muy importante para tu gato.
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